domingo, 4 de octubre de 2009

Inolvidable



No acostumbro hacer homenajes pero creo que hoy vale la pena. Cuando me levanté hoy por la mañana mi marido me dijo murió “la negra”, nos miramos y al instante recordamos nuestra época de adolescentes, cuando escuchábamos en la radio de Salto (República Oriental del Uruguay) las canciones de Mercedes Sosa, Víctor Heredia, Piero, etc. todos prohibidos por la dictadura que por entonces gobernaba ( una forma de decir) nuestro país. Ni hablar de la alegría que sentíamos cuando con suerte conseguíamos un cassette que traían amigos como Gabriel y Juanjo para compartir en los asados y reuniones acompañados de vino y guitarras.
A partir del año 83 con la llegada de la democracia tuve la oportunidad de verla varias veces en los Festivales de la Citricultura que se realizaban en Concordia. Recuerdo su poncho rojo, parada junto a la partitura porque decía que se olvidaba la letra de las canciones. Su voz era impresionante.
Recuerdo también que en enero me miraba todo el Festival de Cosquín solo para verla y escucharla.






Meses atrás sentí el impulso de comprar el original de “ Cantora” su último C.D. que es doble, el destino quiso que no lo encontrara en la disquería del barrio, me quedé con las ganas y ahora no solo estará agotado sino que costará más caro o tal vez no y lo pueda tener pronto.
Elegí la letra de “Y dale alegría a mi corazón” cuya letra es de Fito Páez porque cantada por ella a mí me gustaba mucho y expresa de alguna manera lo que yo sentía al escucharla.


Fito Páez – Y dale alegría a mi corazón


Y dale alegría, alegría a mi corazón
Es lo único que te pido al menos hoy
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Afuera se irán la pena y el dolor

Y ya veras, las sombras que aquí estuvieron no estarán
Y ya, ya veras, bebamos y emborrachemos la ciudad

Y dale alegría, alegría a mi corazón
Es lo único que te pido al menos hoy
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Y que se enciendan las luces de este amor

Y ya veras, como se transforma el aire del lugar
Y ya veras, que no necesitaremos nada más

Y dale alegría, alegría a mi corazón
Que ayer no tuve un buen día, por favor
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Que si me das alegría estoy mejor

Y ya veras, las sombras que aquí estuvieron no estarán
Y ya veras, que no necesitaremos nada más

Y dale alegría, alegría a mi corazón
Es lo único que te pido al menos hoy
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Afuera se irán la pena y el dolor
Y dale alegría, alegría a mi corazón
Y dale alegría, alegría a mi corazón (nena)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Fernanda cuanto te entiendo desde que me entere mi cabeza hizo una regresion alos años que recuperamos la democracia, fui mama en agosto del 83 , y tome conciencia que mi hija iba a vivir en un pais libre cuando fui a verla cantar GRATIS en las escalinatas del parque lezama y me dije algo cambio esta feliiz cantando y bailando LA NEGRA. Ademas me enseño a conocer a Violeta, a Alfonsina , que habia un Charlie que habia escrito inconciente colectivo, y como esto mil cosas mas. Tengo una tristeza muy grande espero que le este cantando a Adri Aquellas pequeñas cosas de su amado Serrat. Cristina la tejedora

Alix dijo...

:(
Otra más que se nos va :(
Abrazitos

Themis dijo...

Seguirá viviendo en sus canciones y en nuestro recuerdo porque significó mucho para quienes vivimos aquellos años, fue parte de nuestra adolescencia.
La ví hace muchos años aquí en la televisión sueca, trataba de ni pestañear para no perderme un segundo de verla.
Cariños

Carmen Tye dijo...

Si que la tendremos siempre presente con sus grandes canciones, universalemente sera extranada..

Un beso muy grande y con todo carino!